Crema de caléndula apta para todo tipos de pieles, también para las más sensibles. Es de uso diario y para toda la familia.
Nutre y repara la piel utilizando: Weleda Crema de Caléndula 75 ml
Esta crema para toda la familia está indicada para el cuidado de la piel de la cara y del cuerpo. Protege la piel frente a las agresiones externas como el viento o el frío.
Weleda Crema de Caléndula 75 ml está creada con ingredientes 100% naturales, de los cuales un 96% son biológicos. Está compuesta por extractos de flores de la caléndula que ayudan a calmar la piel y a nutrirla profundamente, mientras que el aceite de almendras dulces y la cera de abeja restauran su manto protector sin obstruir los poros. Es apta tanto para adultos como para bebés por su fórmula natural y suave.
Su textura es untuosa por lo que previene el desecamiento cutáneo y protege la piel de todo el cuerpo, calmando, especialmente, las pieles más secas, sensibles e irritadas. No contiene conservantes, colorantes, perfumes sintéticos o sustancias de origen petroquímico. Es apta para celíacos.
¿Para quién está indicado Weleda Crema de Caléndula 75 ml?
Weleda Crema de Caléndula 75 ml está indicada para su aplicación la dermis, manos y cuerpo del bebé, incluso cuando sufra de piel sensible y reactiva, así como para adultos con piel sensible, irritada o seca.
¿Cómo se aplica Weleda Crema de Caléndula 75 ml?
En caso de aplicársela al pequeño, se debe hacer a diario o antes de salir de paseo, por su cara y manos, para protegerla de las condiciones climatológicas adversas. En el caso de los adultos, se debe aplicar con la dermis completamente limpia para que sea mejor absorbida por la piel.
Recomendación del farmacéutico sobre Weleda Crema de Caléndula 75 ml:
Junto al uso de crema hidratante en la piel, se deben escoger productos de higiene e hidratación aptos para la condición que se tenga, así como factores de protección solar elevados que eviten la incidencia directa de los rayos del sol. Y no olvidar usar crema en invierno, para proteger la piel de las agresiones externas como el frío y el viento porque estos pueden provocar que la piel se seque y se cuartee.